José Luis Rodríguez Yaiba
EVIDENCIA
Cuando el cascarón se empieza a teñir de negra tinta por dentro
y sólo pequeños espacios entre las letras perduran grises,
blancas grietas surgen de los subtítulos
y explican el deseo de: llenar toda hoja virgen…
con mis extremidades incorpóreas,
o de adornar mi celda con evangelios entrelazados
que expliquen el porque de lo mío,
o que extingan el porque de lo nuestro
inaceptable como los rayos de luz creados por mí
combinando perfectamente con los que ahora se cuelan entre las grietas,
pese a no haberse visto antes,
pese a haber nacido de lo opuesto
¿si es verdad que sólo ves lo interno
cómo es que pintaste tu cascarón distinto por fuera?
¿o es que todo es contradictorio
como cuando calculaste el sentimiento?,
¿o es que todo es contradictorio
como cuando no calculaste los sentidos?,
¡¡¡es todo contradictorio!!!
como cuando yo por fin disponga de una masa
para luchar contra la masificaron
y así...
¡todo se funda en uno!
(o mejor dicho...
en el último de los hoyos negros)
...
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