ANGELICA JAQUE HERRERA
Abrilde Santiago
El asfalto agobiante
que asfixia hasta mis pasos,
en este Abril que ha incendiado
los árboles de esta ciudad tan gris,
ese jacarandá que a destiempo
estalló en insolente azul
instalado en la esquina,
llamativo como las fugaces
prostitutas que florecen
en el anochecer de la calle Providencia,
esta bruma de smog, indiferencia y soberbia,
me atan a este escaño
a esperar una lluvia de hojas secas
para verlas rodar,
mientras un cigarrillo se muere
entre mis dedos, al igual
que se mueren las horas cansadas
en los pétalos de las amapolas.
Esta muchedumbre de gentes
vestidos de gris marengo,
me interrumpe el desvarío
que el cuerpo me pedía,
como un analgésico para
la tinta de esa pluma rutinaria,
que por unos breves minutos
dejó de escribir para ti.
...
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