ANGELICA JAQUE HERRERA
Así te conocí (Rafael)
Con el sueño roto,
atrapada... en una red
¡reventando el alma¡
tropecé contigo,
¡enredado también¡,
jugando al irreverente
franqueando los límites
con el arrojo de la juventud.
Y jugué, ...jugamos¡
hasta que el juego se hizo migas
y desvestimos las mentiras
hasta le dimos rostro a las palabras
y autores a los pensamientos¡
Ahí se me fijó una idea...
AZUL,
definitivamente azul,
a veces tan transparente
como los cielos llenos de oxígeno.
Azul oscuro
como una estruendosa noche
quebrada por rayos y sangre
¡disfrute del inquisidor¡
Azul
tristemente azul
confuso, estremecido, desarmado.
Azul
alegremente azul
¡tanto¡ que te iluminas,
¡que me iluminas¡
Azul
secretamente azul,
furtivo, velado, centinela
de tus verdades.
¡Así te veo¡, opalino
artesano de ficciones,
de oscuros ojos risueños,
que vas mojando la vida con cerveza,
mientras buscas tu pasaje a Nueva York
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